RIIAL

Espacios de Estudio, Formación
y Diálogo Interdisciplinar

Reflexiones vivas - Documentos - Un método para humanizar la empresa II - La experiencia de encuentro
Formación en valores y desarrollo de la personalidad

Presentación de este espacio

Desafío
  • Necesidad de promover una formación integral

    Novedad
  • Dos ofertas excepcionales del Dr. López Quintás

    Experiencias actuales
  • Escuela de Pensamiento y Creatividad

    Blog del Dr. López Quintás
  • Visite su blog

    Documentos
  • Un método para humanizar la empresa VII - El ideal del servicio, alma de la empresa
  • Un método para humanizar la empresa VI - Un testimonio elocuente de empresarios preocupados por la excelencia
  • Un método para humanizar la empresa V - Una clave para superar actitudes consideradas como opuestas
  • Un método para humanizar la empresa IV - Condiciones de la excelencia empresarial
  • Un método para humanizar la empresa III - La excelencia de la vida empresarial
  • Un método para humanizar la empresa II - La experiencia de encuentro
  • Un método para humanizar la empresa I
  • El sentido profundo del juego y de las fiestas VII
  • El sentido profundo del juego y la fiesta VI - Valores formativos del deporte
  • El sentido profundo del juego y la fiesta V - El juego deportivo y la formación humana
  • El sentido profundo del juego y la fiesta IV - Las fiestas iluminan el sentido de la vida
  • El sentido profundo del juego y la fiesta III - El sentido de las fiestas
  • El sentido profundo del juego y la fiesta II - El juego, fuente de luz y de fiesta
  • El sentido profundo del juego y la fiesta I - Revalorización actual del juego
  • El silencio de Dios
  • Las sinrazones del aborto XVIII. Reflexión final
  • Las sinrazones del aborto XVII. La gran meta actual: evitar todo tipo de aborto
  • Las sinrazones del aborto XVI. La gravedad del síndrome postaborto
  • Las sinrazones del aborto XV. El “derecho al aborto”: una contradicción en sus términos
  • Las sinrazones del aborto XIV. El respeto incondicional a la vida: pilar básico de la sociedad
  • Las sinrazones del aborto XIII. Lo que procede es acoger la vida, no destruirla
  • Las sinrazones del aborto XII. La sinrazón de una “ley de plazos”
  • Las sinrazones del aborto XI. La democracia se asienta en la colaboración y el juego limpio
  • Las sinrazones del aborto X. Respetar la realidad es la base de la vida democrática
  • Las sinrazones del aborto IX. La frivolidad en la defensa del aborto
  • Las sinrazones del aborto VIII. Carácter manipulador de ciertos planteamientos proabortistas
  • Las sinrazones del aborto VII. Recursos tácticos inaceptables
  • Las sinrazones del aborto VI. Estrategia movilizada para la defensa del aborto
  • Las sinrazones del aborto V. Intento fallido de legitimación del aborto
  • Las sinrazones del aborto IV. Qué significa “legalizar” el aborto
  • Las sinrazones del aborto III. Vanos intentos de justificación
  • Las sinrazones del aborto II. El aborto y el regreso cultural
  • Las sinrazones del aborto I. Introducción. La práctica del aborto, un tema que da que pensar
  • La música nos hace más inteligentes
  • Ética privada y ética pública
  • La tolerancia y la libertad de expresión
  • La experiencia estética, puerta de acceso a las experiencias filosóficas
  • El poder elevador del gregoriano y la polifonía de la Escuela Romana
  • Valor expresivo del canto
  • El cuerpo humano y su alto rango
  • La PASIÓN SEGÚN SAN MATEO, de Juan Sebastián Bach (1685-1750), una experiencia estética y religiosa decisiva
  • La experiencia estética, glorificación de lo sensible
  • El poder formativo de la música
  • Una clave para una enseñanza eficaz
  • Romano Guardini, una vida consagrada a la verdad
  • La responsabilidad de los medios en el fomento de la paz
  • Romano Guardini, un gran maestro revitalizado
  • El silencio de Dios
  • Aportación decisiva del cristianismo a la cultura occidental
  • La pedagogía de la admiración y su fecundidad educativa
  • Los niveles de realidad y de conducta y su importancia decisiva en la vida humana
  • La belleza de la armonía entre naturaleza y cultura
  • La creatividad en la vida cotidiana (primera parte)
  • La creatividad en la vida cotidiana (segunda parte)


  • Abrir documento completo

    Un método para humanizar la empresa II

    LA EXPERIENCIA DE ENCUENTRO

    Alfonso López Quintás

    El cuidado en distinguir los diversos modos de realidad que existen y las diferentes actitudes que debemos adoptar respecto a ellos empieza a darnos luz para comprender acontecimientos muy significativos de nuestra vida. Las experiencias reversibles -de doble dirección- sólo se dan entre seres que tienen cierto poder de iniciativa. Por eso, si queremos vivir tales experiencias y beneficiarnos de su inmensa riqueza, debemos respetar las realidades circundantes en lo que son y en lo que están llamadas a ser. El que no respeta una realidad podrá tal vez dominarla (nivel 1), pero se condena a no poder fundar con ella una relación creativa (nivel 2). Es creativa una persona cuando recibe activamente posibilidades que le permiten dar origen a algo nuevo, dotado de gran significación para su vida. Cuando esas posibilidades se las otorga otra persona, tiene lugar el encuentro, en sentido riguroso.

    El encuentro no se reduce a mera cercanía física; es el modo privilegiado de unión que establecemos con realidades dotadas de un singular poder de iniciativa. Un objeto lo puedo tocar, agarrar, manejar, comprar o vender, unirme a él de modo tangencial. Lo que no puedo es encontrarme con él. Y del encuentro depende la riqueza de nuestra vida, según nos enseñan la Biología y la Antropología actuales más cualificadas1. El encuentro puede darse entre una persona y un poema, una canción, el lenguaje, una obra literaria..., porque estas realidades nos ofrecen diversas posibilidades que podemos asumir. Tales formas de encuentro encierran un gran valor, como resalta en la declamación de un poema, la interpretación de una obra musical, la creación de vínculos a través del lenguaje, la participación en los ámbitos de vida que plasma una obra literaria... Pero el valor supremo lo ostenta el encuentro cuando es realizado por dos seres personales, pues las experiencias reversibles adquieren un grado especial de excelencia cuando se realizan entre realidades que gozan de un poder de iniciativa privilegiado en el universo.

    Una persona, por ser corpórea, puede ser agarrada, movida de un lugar a otro, incluso zarandeada. Pero el cuerpo, aunque lo parezca a primera vista, no es un objeto; supera inmensamente la condición de objeto -nivel 1- porque es el medio expresivo de toda la persona. Merece el mismo respeto que ésta, pues se halla en el nivel 2. Esta forma de ver nuestra realidad humana opera una verdadera transfiguración en nuestra mente y nuestra actitud.

    • Nos liberamos de la sumisión al espacio y descubrimos que una realidad distinta de nosotros se convierte a menudo en íntima, sin dejar de ser distinta. De esta forma, realidades que están fuera de nosotros en el nivel 1 se nos tornan íntimas en el nivel 2.
    • Eso queremos decir al indicar que, en este nivel, los términos “dentro” y “fuera” dejan de oponerse para complementarse. Dos personas que se encuentran, en sentido riguroso, y crean, así, una forma auténtica de amistad no están la una fuera de la otra. Ambas se hallan insertas en un mismo campo de juego, en el cual el aquí y el allí, el dentro y el fuera no indican separación entre una realidad y otra, sino lugares distintos desde los cuales están participando en un mismo juego creador, es decir, colaborando al logro de una misma meta.
    • Por el contrario, si, al tratar a una persona, sólo tomo en consideración su cuerpo y la reduzco a medio para mis fines, la rebajo de rango, la envilezco, le hago injusticia, soy violento con ella. Cada tipo de realidad nos pide una actitud adecuada.
    • La actitud que debemos adoptar respecto a las personas no es la dominadora y posesiva –propia del nivel 1-, sino la respetuosa, generosa, colaboradora, servicial...-propia del nivel 2-, que es, justamente, la actitud reclamada por las realidades que tienen posibilidades que ofrecer, como sucede con una obra literaria o artística, un valor, una institución, una persona...


    [1] Cf. Juan Rof Carballo: El hombre como encuentro, Alfaguara, Madrid 1973. Manuel Cabada Castro: La vigencia del amor, San Pablo, Madrid 1994.

    (descargar artículo completo)