Redes Sociales

Abad trapense rompe el silencio y responderá a preguntas en un encuentro virtual

El padre Enrique Trigueros, abad del Monasterio de Santa María la Real de Oseira, responderá a las preguntas de quienes quieran inscribirse al XI Encuentro en torno al claustro

(es.aleteia.org).-El monje trapense Enrique Trigueros, abad del Monasterio de Santa María la Real de Oseira, ha aceptado una propuesta que años atrás era imposible de  imaginar:  contar su vida de silencio, trabajo y oración en un encuentro virtual. 

A propuesta de la Fundación DeClausura, el sacerdote abrirá este 20 de abril las puertas de su cenobio, el monasterio más monumental de Galicia, conocido como el “Escorial gallego”, presentará a su comunidad cisterciense y revelará detalles sobre cómo celebran la Pascua.

Los monjes y las monjas trapenses pertenecen a la familia monástica que sigue a Cristo, según la Regla de San Benito, quien la escribió en el siglo VI. 

Los monjes y las monjas trapenses tienen fama de ser personas silenciosas. Sus horarios están dedicados al trabajo y la oración. El mundo entero los descubrió con la película “El gran silencio”.

No hay “voto de silencio”

De algún modo, esta impresión, que tiene un cierto fundamento en la realidad, ha llevado a la idea de que los trapenses hacen “voto de silencio”; cosa que no es verdad. 

Como explica la misma página web del Monasterio de Oseira, “en un monasterio cisterciense hay tres motivos para hablar. Son: la comunicación funcional en el trabajo o durante los diálogos comunitarios; el intercambio espiritual sobre la vida personal con los superiores o con un hermano acompañante; y la conversación informal en ocasiones especiales”. 

“El silencio, sin embargo, se considera implícitamente incluido en una de las promesas hechas por el monje en el momento de su profesión monástica; a los cinco o seis años después de entrar en el monasterio”, explican los monjes de Oseira. 

OSEIRA

mosteirodeoseira.org

Los monjes, según indican, prometen la “conversión”, es decir, “fidelidad a la vida monástica; de la cual una parte es la disciplina de mantener un ambiente de silencio, que exige controlar la lengua”.

Otra forma de hablar

El monje trapense comprende que el hablar no es siempre la forma mejor de comunicación; sino que con frecuencia se utiliza la palabra no para comunicarnos sino como encubrimiento personal. 

“Una sencilla actitud amistosa, silenciosa y orante comunica algo que va mucho más allá de las palabras”, explican los monjes.

A estas y otras preguntas que suscita la peculiar vida de los monjes trapenses responderá el padre Enrique Trigueros en el encuentro virtual. En él puede  participar cualquier persona que quiera inscribirse. Puede hacerlo a través de esta página web: Inscripción al XI Encuentro en torno al Claustro – 20 de abril.

Deja una respuesta